Día 12 (Múnich)

Ese día tocaba levantarse pronto ya que nos esperaba un largo viaje hasta la capital de Baviera, Múnich. Teníamos unas dos horas de trayecto, tuvimos suerte de no encontrar ninguna retención y a las diez de la mañana ya estábamos entrando a la ciudad.

En Múnich teníamos reservado el hotel Ibis Muenchen City West:


Para entrar en Múnich tuvimos que tener cuidado de no entrar dentro de la zona medioambiental, en la que solo se puede circular si el coche lleva una pegatina (más información en el apartado consejos y conclusiones), el hotel estaba fuera de esta zona. En las calles que rodeaban al hotel se podía aparcar sin pagar, tuvimos suerte de encontrar un sitio justo al lado del hotel, todo y que contábamos con la opción de que el hotel disponía de parking. La parada de metro más cercana estaba en la misma puerta del hotel, desde esta parada hasta el centro apenas habían cincos minutos en metro.
Cogimos un billete llamado Partner Day (11,70€) que según leímos “Es válido para cinco personas y es posible utilizarlo cuantas veces se quiera en diferentes medios de transporte desde el momento de la validación hasta las 6 de la mañana del día siguiente”.

Múnich es una ciudad grande (es la tercera ciudad más grande de Alemania) y sabíamos que para verla serían necesarios un mínimo de 2/3 días, pero nosotros decimos dedicarle solo uno, ya que nos llamaban más otras cosas.

Una vez en el metro nos bajamos en la plaza Karlsplatz, desde aquí fuimos caminando hasta la plaza Marienplatz, donde se encuentra el ayuntamiento nuevo y la oficina de turismo.

De camino vimos la iglesia de San Miguel (Michaelskirche):



Una vez en Marienplatz y aprovechando que eran las doce en punto pudimos ver como sonaba y funcionaba el carrusel que hay en la torre del reloj:



En la oficina de turismo pudimos hacernos con un mapa de la ciudad (50 céntimos de euro). Sin duda el ayuntamiento nuevo es uno de los edificios más bonitos de la ciudad:



La idea era ir callejeando sin prisas e ir viendo todo lo que diese tiempo, teníamos una lista bien larga de cosas para ver pero sabíamos que no daría tiempo a todo.
Luego nos fuimos hasta la catedral de Múnich, el acceso al interior es gratuito. Lo que más a destacar es la altura de sus dos torres, una de las cuales estaba en obras:



Luego fuimos hasta Odeonsplatz. En esta plaza hay un pórtico llamado Feldherrnhalle, el cual es bastante parecido a uno que hay en Florencia:



En esta plaza también se puede visitar la iglesia de los Teatinos (Theatinerkirche).

Unos jardines llamados Hofgarten:



También pasamos por una de las cervecerías más conocidas de la ciudad llamada Hofbräuhaus, pero entre que no somos muy amantes de la cerveza y estaba bastante llena, simplemente echamos un vistazo sin consumir nada.

El antiguo ayuntamiento visto desde la puerta de otro de los edificios emblemáticos de la ciudad, el McDonald’s:



Luego fuimos al Viktualienmarkt, un mercado situado en el centro de Munich donde se pueden encontrar paradas en la que se venden desde flores, hasta carnes y embutidos. También hay algún que otro pequeño garito donde es posible comer algún bocadillo o plato combinado.

Después del mercado fuimos hasta la cercana iglesia de San Pedro o Peterskirche. Habíamos leído que se podía subir a su torre de 56 metros de altura y 306 escalones (2€ por persona).
Una vez arriba de la torre las vistas son muy bonitas:





El sinuoso acceso a la torre:



Desde aquí cogimos el metro hasta Königsplatz. En esta plaza hay tres edificios que en fotos nos gustaron bastante, pero una vez allí nos decepcionaron un poco. No es que fuesen feos, pero el entorno estaba poco cuidado, a los jardines les faltaba algo más de verde:




Volvimos a coger el metro dirección al Olympiapark. Al llegar aquí comenzó a llover y decidimos entrar al BMW Welt (gratuito), una especie de concesionario / expositor situado al lado de la fábrica de BMW.




Cuando dejó de llover nos acercamos al Olympiapark, pero ya era algo tarde y tampoco pudimos ver gran cosa. Por la zona había montada una pequeña feria:



Ahora tocaba volver al hotel y descansar para continuar con la ruta al día siguiente. Como hemos comentado antes estábamos alojados en el hotel Muenchen City West. La situación nos gustó bastante ya que todo y no estar en el centro estaba bien comunicado con metro. Tampoco vimos que estuviese en ninguna zona / barrio conflictivo. La habitación correcta para pasar una noche con la lavabo completo dentro de la habitación. Precio 67,50€ impuestos incluidos (una noche), sin desayuno.


Comentarios